lunes, 17 de diciembre de 2007

En estos días de asueto...

Hermosa sensación la que ofrece un lunes de vacaciones después de un año de labor. Muchos optarán por salir con sus amistades o parientes. Otros escaparán del frío de la Meseta Central Mexicana y se refugiarán en las templadas llanuras costeras del país. Después de las visitas a las amistades y tal vez una escapada a la heroica, cafetera y aromática Córdoba, Veracruz, he de regresar a mi habitación, como mamífero hibernante, a leer -con ropa de lana y una bebida caliente- una parte de la "Historia verdadera de la conquista de la Nueva España", testimonio hecho por Bernal Díaz del Castillo como participante en las expediciones españolas que salieron de Cuba en 1517, 1518 y 1519, hacia las costas orientales del actual territorio mexicano.

A pesar de ser un tomo grueso, su lectura se antoja provocativa y desafiante. Imaginar al ya viejo Bernal Díaz del Castillo, que desde algún lugar de Guatemala se sienta a la luz de una candela a contarnos, como un abuelo, sus experiencias en tierras mexicanas, desde su primer contacto con los aguerridos mayas del sureste, hasta su participación en el asedio liderado por Hernán Cortés y que provocó la derrota de la ciudad lacustre de México-Tenochtitlán, capital del imperio Mexica -mal llamado "azteca".

Después del ponche de alguna posada, sé que llegará la nostalgia del año que está por terminarse y ojalá -al menos- en el año venidero no vuelva a encontrarme a nadie que tenga el descaro de afirmar que, puesto que no está de moda, no vale la pena estudiar historia.

Imagen: El soldado-cronista Bernal Díaz del Castillo.

Para leer un artículo sobre la importancia de la lectura, clicar aquí. Independientemente del credo de cada quien, el contenido del documento es valiosísimo y puede descargarse en formato PDF.

3 comentarios:

JCDO dijo...

Umar: ¿Por que mal llamado azteca?

Tu post: Invitación a la lectura, de aquel que la disfruta.

Un abrazo

Umar dijo...

Saludos nuevamente, JC.

Gracias por el comentario.

Los nahuas de México-Tenochtitlán se autodenominaban Mexicas. En un principio se denominaron aztecas por haber salido de aquel lugar conocido como Aztlán. Sin embargo, una vez que dejaron de ser lacayos del reino de Azcapotzalco, quemaron todo aquel registro que los pintara como un pueblo vulgar y errante: ya no eran aztecas. Hasta los últimos momentos del imperio (1521), los habitantes de México-Tenochtitlán fueron conocidos como Mexicas.

Paz y abrazos.

JCDO dijo...

Gracias Umar! Ilustrado nuevamente me voy. Además ya pensando, podría ser natural querer borrar los "vergonzozos inicios" pero que sentido tiene si aunque vergonzosos, fueron el inicio de ese gran imperio, ¿O que siempre se empieza por algo grande y maravilloso? Yo creo que no. Oye me llevo tu ilustración a esta paloma pues me será de gran utilidad allá.

Paz